Antes de entrar en detalles, es importante conocer el estado general de la industria en nuestro país. Según un informe presentado por la organización DEV (Desarrolladores Españoles de Videojuegos) algunos datos relevantes serían la facturación de 313 millones de euros en 3013, cifra que crecerá un 23% en 2017. Con estos datos podemos apreciar que la industria de los videojuegos en España se ha recuperado de la crisis económica y ha conseguido volver a la senda de crecimiento.
Actualmente, la industria española de videojuegos está compuesta por 330 empresas que se han triplicado desde 2010, por lo tanto, sabemos que es una industria muy joven ya que el 68% de las empresas tienen menos de cinco años de vida y tan sólo el 18% tienen más de diez años. Además, el 59% de estas cuentan con menos de 10 empleados y sólo un 13% cuenta con más de 25 trabajadores.
Sin duda este boom de emprendimiento en el desarrollo de videojuegos ha venido de la mano con la distribución online y el crowfunding. La proliferación de las plataformas online ha facilitado que los videojuegos puedan llegar a millones de personas reduciendo así costes y facilitando la labor. Un claro ejemplo de tiendas online serían Sony, Microsoft, Nintendo o Steam.

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